Guindos pide al BCE que actúe y ataje la disparidad en la financiación de empresas

El ministro justifica que los mecanismos de transmisión de las políticas de ayuda “está roto”

El Gobierno español continúa con su ofensiva para que el Banco Central Europeo (BCE) asuma un papel más activo en la lucha contra la crisis. El ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, aseguró hoy que el mecanismo de transmisión de la política monetaria del BCE “está roto” por la fragmentación de los mercados de crédito, y abogó por introducir un “tipo de interés único” en Europa para las empresas de la misma calidad.

El ministro ha justificado que hay un problema cuando “empresas españolas muy solventes están pagando un diferencial de tipos de interés” más alto que algunas otras europeas, ha dicho Guindos a su llegada a la reunión de los ministros de Finanzas de la eurozona. Según ha añadido, esto evidencia la fragmentación de los mercados de crédito.

“Lógicamente lo que pasa es que está roto el mecanismo de transmisión de la política monetaria y eso requiere acciones, que, creo, el primer interesado en ponerlas en marcha es el propio BCE”, ha señalado el ministro, quien pretende abordar este problema con sus homólogos europeos. De hecho, el presidente del BCE, Mario Draghi,reconoció tras el último consejo de gobierno del instituto emisor que mirará en un entorno de “360 grados” para buscar soluciones y aplicar nuevos “instrumentos” con vistas a atajar los problemas que se planteen, como la fragmentación que impide que fluya el crédito en países como España, aunque el estudio esté en una fase muy preliminar.

A este respecto, Guindos ha considerado que, la acción fundamental que Europa puede llevar a cabo es crear la unión bancaria. “Con una unión bancaria que funcione bien, en la cual se avance claramente en lo que es la integración de un supervisor único a través de la recapitalización directa de los bancos y un mecanismo de resolución único, la unión monetaria funcionará mejor”, ha dicho. No obstante, ante los problemas que está encontrado este proceso, se podrían buscar soluciones alternativas.

Así, ha añadido que los problemas de transmisión de los impulsos monetarios también se solucionarían con “un tipo de interés único para todas las empresas en Europa de la misma calidad”. Gracias a estas medidas, ha destacado, Europa avanzará y “se conseguirá lo que tiene que ser una política monetaria única”.

Guindos también ha declarado que en estos momentos “el crecimiento económico es lo que está faltando en Europa” y es uno de los problemas fundamentales, al tiempo que otras economías del mundo, como EE UU o países emergentes y Japón han vuelto a crecer. “Europa se está quedando atrás y eso es algo sobre lo que tenemos que reflexionar, ver lo que no hemos hecho bien y ver lo que se puede hacer para evitar una situación que está golpeando a lo que es el bienestar de los europeos”, indicó.

Fuente: economia.elpais.com

Información de la Ley de Morosidad, que reduce los plazos de pago de empresas y AAPP

La nueva Ley de Morosidad, publicada el día 6 de Julio de 2010 en el Boletín Oficial del Estado (BOE), fija unos plazos máximos de 60 días para los pagos de empresas a sus proveedores y de 30 días en el caso de las administraciones públicas, con un periodo de adaptación en ambos casos que se extenderá hasta 2013.

La Ley obliga al Gobierno a articular a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) una línea de crédito directo dirigida a ayuntamientos con el fin de que puedan pagar sus deudas con empresas y autónomos.

Asimismo, elimina la posibilidad de que las empresas negocien plazos superiores de pago a los fijados por la ley. El periodo transitorio para que las administraciones públicas reduzcan su límite de plazo se extiende hasta 2013, con una escala de 50 días para este año, 50 para 2011, 45 para 2012 y 30 días desde el 1 de enero de 2013.

En el caso de las empresas privadas, y exceptuando el sector de la alimentación y los productos perecederos -que quedarán obligados a pagar en 30 días en todos los casos- el período transitorio también se extiende hasta 2013, de forma que desde la entrada en vigor de la ley y a lo largo de 2011 el plazo será de 85 días, de 75 en 2012 y de 60 días ya a partir del siguiente año.

Cesiones a constructoras y editoriales

No obstante, las constructoras de obra pública contarán con plazos distintos para rebajar el plazo máximo de pago de facturas a sus subcontratistas y proveedores, que actualmente supera los cien días.

En concreto, las empresas del ramo podrán pagar a 120 días desde hoy hasta el 31 de diciembre de 2011. En el año siguiente este plazo deberá rebajarse a 90 días, para fijarlo en los 60 reglamentarios en el ejercicio 2013.

Asimismo, la ley habilitará al Gobierno para determinar un “régimen especial” de pagos para el sector del libro que tenga en cuenta las “especiales circunstancias” de este sector en relación a los ciclos de explotación, la rotación de ‘stocks’ y el específico régimen de depósito de libros.

La empresas deberán revelar cuanto tardan en pagar

Además, establece que las empresas informen en su memoria de cuentas anuales sobre los plazos en los que abonan las facturas a sus proveedores.

La nueva norma persigue equiparar los plazos de pago con los que se registran en otros países de Europa y aumentar así la competitividad de las empresas españolas, ya que en la actualidad, la Administración tiene pendientes de pago con las empresas por un monto total de 38.000 millones de euros, mientras que, de su lado, la deuda de las empresas con sus proveedores se sitúa en 60.000 millones de euros. (Cinco Dias.com)

Archivo Ley BOE, Modificación Ley de Morosidad: http://www.boe.es/aeboe/consultas/bases_datos/doc.php?id=BOE-A-2010-10708

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